The Hobbit: The Desolation of Smaug

Título: The Hobbit: The Desolation of Smaug

Director: Peter Jackson

Escritores: Peter Jackson, Philippa Boyens, Fran Walsh, Guillermo del Toro

Productores: Peter Jackson, Fran Walsh, Zane Weiner

Elenco: Martin Freeman, Ian McKellen, Richard Armitage

Popcorn Movies Rating: 10

El rey ha regresado

Por: David A. Maldonado Hernández

Como pocas veces en la historia de las franquicias, The Hobbit: The Desolation of Smaug es más intensa que la primera parte.

Bilbo, Gandalf y los enanos están en el camino escapando del orco blanco Azog. Su misión: entrar a la Montaña Solitaria, matar el dragón y reclamar el trono de Erebor del que Thorin es el legítimo rey. Pero este no es un camino sencillo y una vez más los héroes tienen que enfrentarse a nuevos obstáculos para llegar a la montaña mientras que un nuevo terror se levanta de entre las profundidades de la Tierra Media.

Lo primero que muchos quieren saber es si The Desolation of Smaug es mejor que su predecesora, An Unexpected Journey. La respuesta es sí, es mejor. Pero es mejor porque tiene más acción y te mantiene al borde del asiento toda la película al punto que no sabemos nunca en qué momento culminará esta entrega.

A diferencia de la primera parte, en esta el director Peter Jackson no pierde tiempo introduciendo a los personajes nuevos, sino que los conocemos en medio de la acción. Como originalmente iban a ser solo dos filmes, pues esta entrega es la más difícil de dividir porque no realmente no tiene ni principio ni final. Lo que sí tiene es suficiente entretenimiento para satisfacer a los fanáticos. Inclusos aquellos fans de The Lord of the Rings que se sintieron decepcionados por An Unexpected Journey saldrán satisfechos de esta.

Es cierto que Jackson se tomó muchas libertades en la adaptación del libro, como la creación del personaje de Tauriel (Evangeline Lilly), pero no deben confundirse pues mucho del material añadido sí fue inspirado por Tolkien pues fue sacado de los apéndices del libro de The Return of the King, donde el autor aprovecha para aclarar algunas dudas. Incluso la inserción de Legolas a la historia queda muy bien y posiblemente quedará mejor cuando el arco esté completo con la próxima película.

En el aspecto técnico la película es casi perfecta. Los efectos especiales son de clase mundial, como solo WETA sabe traerlos. Cada criatura, paisaje y locación diseñada virtualmente se ve y se siente real. La fotografía resalta el mundo fantasioso donde se desarrolla y en el formato IMAX 3D se puede apreciar cada detalle. Uno de los pocos filmes que vale la pena ver en ese formato.

Lo único que se quedó corto a la anterior fue el prólogo al comienzo y la musicalización. A diferencia de The Two Towers (la segunda entrega en la trilogía anterior), el compositor Howard Shore no logra crear un tema que podamos escuchar e identificar como parte de la música de esa película en particular. Cada entrega de la trilogía anterior tiene su propio tema musical, el filme anterior a este también lo tiene, pero aquí no se logró.

Definitivamente The Desolation of Smaug es una de las mejores películas del año y digna de formar parte de esta saga. La audiencia no podrá esperar al próximo año para ver el desenlace.