Título: Jack Reacher
Director: Christopher
McQuarrie
Escritor: Christopher
McQuarrie
Productor: Tom Cruise, David
Ellison, Dana Goldberg, Don Granger, Gary Levinsohn.
Elenco: Tom Cruise,
Rosamund Pike, Richard Jenkins, David Oyelowo.
Buena acción. Buen entrenamiento. Más por favor.
Por: David A. Maldonado Hernández
De vez en cuando llegas a una sala de cine con dudas o
expectativas bajas sobre la película que vas a ver y resulta que es mejor de lo
que esperabas y mejor que mucho de lo que se ha visto en todo el año.
Un francotirador elimina a cinco civiles inocentes en
una ciudad a plena luz del día. El sospechoso es capturado pero no habla, solo
escribe un mensaje en una hoja de papel “Get Jack Reacher”. Pero Reacher (Tom
Cruise), ya va de camino a la ciudad, porque es un hombre que no puede ser
encontrado, él te encuentra a ti. Reacher es como un policía, o al menos eso
era, no le importa la ley, no le importa la evidencia, solo le interesa lo que
está bien y mal.
Esta película es puro entretenimiento y del bueno. El
director Christopher McQuarrie logró que su primera película en 12 años fuese
todo en uno: interesante, emocional y entretenida. Este es un thriller
policiaco con mucha acción y bastante humor, elementos necesarios para mantener
alerta a tu audiencia. Muchos clasificarían esta película cómo “no brainier”,
lo que significa que no necesitas tener mucho cerebro para entenderla o
disfrutar de ella. Pero lo bueno es que no se recuesta de eso para dejar caer
otros elementos que la elevan a ser una gran producción.
Lo primero que sobresale es el elenco. Tom Cruise
sigue probando que es uno de los mejores actores de Hollywood y a sus 50 años
continúa dejando saber que no está listo para retirarse y el mundo no tampoco
está listo. Reacher no es un personaje que sabremos muchos sobre él, porque es
del tipo de sujeto que llega a un caso, se envuelve, lo resuelve y sigue con su
vida. Todo lo que sabemos de él es lo que demuestra mientras investiga y es lo
suficiente para que el público conecte con él solo al escuchar el tipo de
persona que es, justo antes de que
aparezca en escena.
El resto del elenco se compone de Rosamund Pike que
tal vez no sea la mejor actriz del mundo, ni la más hermosa, pero en esta
película tiene una escena bastante emocional (ojo que no dije emotiva), donde
va a hablar con los familiares de las víctimas y es aquí donde, en solo dos
minutos, demuestra su potencial como actriz. David Oyelowo (Red Tails), es uno que hay que mirar
bien su carrera en ascenso porque tiene mucho potencial y aquí demuestra más
madurez y solidez en mantenerse como personaje clave de la película. Por último,
Jai Courtney es el villano, y aunque no tiene mucho tiempo para hacer una gran
actuación, si logra marcarse como un nuevo “tough guy” de Hollywood y prepara
su rostro para que lo recordemos en A
Good Day to Die Hard, donde actuará junto a Bruce Willis.
El segundo gran elemento de la película es la
historia. Uno ve el nombre Tom Cruise y un PG-13 y piensa que va a ser bastante
suave. Pues no es así. Esta historia va tan oscura como puede irse y cuando
pensamos en el momento histórico que Estados Unidos vive en estos momentos con
su ola de tiroteos en masa, es un milagro que esta película no se ganara un
retraso en las salas de cine. El desarrollo de los personajes está bien
balanceado porque no se queda en la superficie, pero tampoco va tan profundo
como para que se sienta fuera de lugar en el tipo de filme que estamos viendo.
En tercer lugar tenemos la acción. Todo el tiempo tiene
sentido, lo que significa que no hay nada puesto para entretener a la
audiencia. Toda la acción adelanta la trama constantemente. También se queda
todo el tiempo dentro de lo verosímil. Aunque es normal que en las películas
exageren las cosas, aquí no hay ningún momento en donde la audiencia diga “que
embuste”. Y lo mejor está presente a un ritmo constante pero no abusivo. Hay
momentos para ponerse serio, hay momentos para reírse y hay momentos para que haya
acción en todas sus formas: balaceras, peleas mano a mano y persecuciones en auto.
Lo más interesante es que el director logró algo que solo había visto a
Christopher Nolan hacer, y es crear una escena de pelea donde el ruido
ambiental fuese suficiente y no se necesite el elemento musical.
Claro que tuvo sus fallas, pero no las suficientes
para dañar la experiencia. Hay una en particular que no puedo decir por los
spoilers, pero está ahí. No es culpa de la película en sí, sino del sistema de
Hollywood. Justo en el giro del segundo acto hacen uso de cierto elemento que
ya hemos visto y que realmente ya molesta. No me atrevo a decir nada más pero
realmente no es justo y da una mala imagen de ciertas personas. Ya no diré más.
Si estás buscando buen entretenimiento y eres de las
personas que disfruta del thriller policiaco y acción, esta película es para ti.
Su buscas mucha profundidad, romance, y que te vuelen la cabeza con algo que
marcará el género para siempre, saldrás desilusionado. Por mi parte solo quiero
decir que vale la pena intentar una secuela y, tal vez, una franquicia.
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